LOS CAMISAS NEGRAS.

Cada día que pasa nos acerca mas a la fecha de otro concierto polémico.
Juanes cantando en Cuba, en la plaza cívica, conocida como de la revolución. Actuar, donde sea contratado o donde desee hacerlo un artista por los motivos que desee, entra dentro de los conceptos de libertad, que en una dictadura no son conocidos, ni respetados.
Juanes tiene derecho a ir donde quiera. Incluso con el lema que desee armar dentro de una mercadotecnia cualquiera.

Pero ir a Cuba no esta exento de discusión.

Cuba es una dictadura. Me gustaría que Juanes lo definiera abiertamente para ver que reacción tendría su concepto de libertad en los testaferros políticos del régimen.
Cantar no es un acto de indiferencia política, cuando se elige un lugar desde donde se instigo a las masas, como si fuera un coliseo romano a definirse o todos con él o todos contra él. Desde ese lugar que nunca en 50 años ha sido “neutral”, se mando a fusilar gentes inocentes, para calmar los deseos de sangre de un grupo de rebeldes ansiosos de venganza y muerte.

En Cuba no hace falta personajes que vayan a cantarle al pueblo,para entretenerlos un rato y simular que se hizo a nombre de la paz. en Cuba hace falta que la dictadura se acabe y entonces sí, los que vayan canten donde quieran y lo que quieran, los de fuera y los de adentro que viven fuera, pero no pueden cantar en Cuba, Chirino, Albita, Sandoval, De Rivera, Gloria Estefan.
Cuba ahora necesita compromisos por su libertad, política, religiosa, libertad para expresar sus puntos de vistas, a cualquier persona, sin que por decir que hay hambre se meta a ciudadanos presos.
Si Juanes se pone a cantar, a quien representa, si del otro lado están Silvio Rodríguez y Amauri Pérez, que todos sabemos son el opio de nuestro pueblo.

El exilio no crea esta polémica, Juanes a pesar de todo no ha creado esta polémica, esta polémica la crea un gobierno tiránico y perverso que va a utilizar a un grupo de jóvenes “camisas negras”, que en nada se diferencian de aquellas, que Mussolini utilizo para tratar de fomentar el Fascismo a como diera lugar, para tundir al pueblo si alguno grita: Viva la libertad, de expresión, viva la libertad de opinión, viva la libertad de usar la Internet, viva la libertad de los derechos humanos, viva la libertad de entrar y salir, viva la libertad de tanto preso de conciencia. Esa es la razón por la que pido a Juanes desista de tal farsa.