lunes, 2 de marzo de 2009

Mejor donde estabamos al principio del caos.

La libertad se convierte en obsesión, me desvela, me inspira a vivir y a escribir.

Viví en Cuba, desde el principio el proceso revolucionario cubano, las transformaciones necesarias que añoraba el pueblo y sufrí las consecuencias de ver como las ansias libertarias se iban desmoronando y dando paso a una dictadura que ponía la represión donde debió brillar la libertad, enterrándola.
Todo este proceso dividió el pensamiento y las acciones en mi patria. Muchos continuaron apoyando los procesos que tuvieron un día su cenit y hoy a ojos vistas van en caída libre hacia el más estrepitoso fracaso. Otros desde el principio como mentes luminosas y preclaras sabían el rumbo a donde se llevaba a las ovejas que balaban incautas y sumisas y la historia les dio la razón.
Algunos optimistas pensaron que pronto volvería todo a correr por los cauces conocidos, la historia los confundió a todos como en un moderno derrumbe de la torre de Babel.
Hoy a 50 años de aquella luz traicionada, las cosas se ven mas definidas y las posturas también, muchos de los que apoyaron el proceso revolucionario ya no están para ver en que se convirtió su sangre derramada y su vital esfuerzo, otros murieron en el exilio, añorando un día poder volver a ver las palmas reales y el suelo donde nacieron y atesoraron amistades y vivencias, no les fue otorgado ese privilegio, un tercio de la nación cubana vive en la diáspora y podrían ser mas si el tirano tuviera la valentía de abrir sus fronteras a la tan ansiada libertad, pero eso demostraría con creces la tesis de su monumental fracaso, si los pocos que me siguen y leen estas humildes y tal vez poco razonadas letras analizan por un instante otras dictaduras contemporáneas, constataran que casi ninguna a impedido salir o entrar a sus territorios, helase el caso de Brasil, Argentina, Chile, Nicaragua, y otros países latinoamericanos que han pasado por esta mal no necesario.
Solo Cuba es un caso atípico de dictadura que expulsa creando salidas manipuladas por el propio régimen como una válvula de escape a situaciones que ya no puede controlar.
Quiero analizar con ustedes los pretextos esgrimidos por esa tiranía como justificantes a su exceso de falta de libertades.
El bloqueo económico o embargo al cabo estos términos en el caso cubano son sinónimo, cuestión que por ningún motivo impide que existan elecciones libres y hacer uso del derecho a criticar y ser criticado, opinar y participar desde diferentes tribunas políticas.
Las diferencias entre el modo de vida de la población obrero- campesina y los dirigentes militares y la cúpula gobernante es inmensa, los beneficios de los que gozan los jerarcas castrenses deja desnudos los conceptos de igualdad, y equidad de los que se presumen en los gobiernos socialistas, que desde Cuba, hasta el pequeño-burques chileno, no dejan de ser cínicas y taimadas farsas sociales, hacedores de políticas que dicen hacer algo que ni es cierto, ni beneficia a las masas cada vez mas empobrecidas.
Pero donde en Cuba, lo han llevado todo a una demagogia exquisita y con la anuencia de palafreneros y oportunistas enquistados y creados por el sistema no parecen entender que el caos de cosas existentes es derivado de la torpe y egoísta forma de conducir al país, en suma ambiciosamente, mejor y más enviciadamente que él mas vil de los capitalismos.

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