martes, 17 de marzo de 2009

La rosa blanca.

Se gana amigos en este mundo cuando a las palabras que encierran esquemas se les responde de manera calmada pero certera.
La patria es aquello que acumula las vivencias y los denuedos que las personas forjan en un periodo de vida.
Los egoístas defienden sus intereses, mas los pobres defendemos la libertad, tal vez con la libertad afloren y crezcan los intereses de todo tipo cosa inevitable, pero no debe existir el hombre sin la libertad, por ella se alimenta el alma, los que alguna maneras hacemos uso o abuso de esta no lo notamos, pero siempre es mejor pecar por exceso que amilanarnos ante el defecto de valorarla.
Es fácil cuando no se involucra el pellejo que cubre la vida, llamar gusano a quien con solo su palabra, porque carece de los instintos guerreristas, expone al mundo su punto de vista sobre una libertad inexistente, otros gozando la suya, en el esplendor de sus beneficios sean pocos o muchos.
Opinando sin haber recibido su dotación de miedo y persecución, hambre y doctrina, atadura de mentiras que demagógicamente arrastran al hombre a la más vil de las caídas, de que vale una revolución que trajo un alza entendible y reconocible de cultural y alfabetización, hospitales gratis y universidades, si cuestiona la vida intima y a cambio de algo exige fidelidad ciega y adhesión impensada, acaso es un modo de comprar conciencias, cuando se ha hecho con el poder ultrajando mas al pueblo que los mismos capitalistas que combatieron en su momento.
El modo de vida que poseen derrocha indignidad, y a ojos vistas dice de ellos su dispendiosa caída.
Hablan los que no saben realidades, de situaciones que han oído de otros, que a su vez las repiten como voceros gratuitos de un sistema en trance de degenerados.
La prostitución en Cuba es mas real hoy que hace 50 años, pero también mas ofensiva al decoro humano, porque no mis palabras, que pudieran ir pintadas de parcialidad, aún cuando evito tal, sino los hechos demuestran un grado tal de perversión que asusta, niños y niñas, jóvenes y adolescentes,enfrascados en un maridaje perverso entre maestros y autoridades para vivir de un sucio negocio del que una revolución verdadera se distingue de una falsa por su combate implacable contra tales practicas.
Pero no culpo a los repetidores de falsedades de su miopía en temas de esta magnitud que al desconocerse tildan y ubican la ignorancia muchos paladines de la libertad toman a una revolución inexistente como bandera y sin darse cuenta andan desnudos por las calles, pregonando falsedades y siendo cómplices incautos de tiranos y verdugos que dicen culpar pero defienden al defender los estragos que han causado en mi pueblo.
Aman la tierra los gusanos que laboran y la barrenan cada instante permitiendo que penetre él oxigeno a ella, es para mi motivo de orgullo ser llamado gusano, de ellos viven agradecidos los campesinos que saben las múltiples virtudes de estos laboriosos organismos, apénense los que hablan de cosas que no han vivido, si por un ideal se muere un hombre, al menos los pequeños deben respetar a los grandes que han muerto y mueren en este mismo instante en cárceles odiadas del sistemas Castrista, por decir solamente que aman la libertad.

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