El Aguila Majestuosa.

. ¿Qué? ¿ Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos? En todo esto no pecó Job con sus labios. Job 2:10.

En el estudio de su historia, México demuestra salir victorioso de grandes y graves crisis, algunas debidas a factores naturales imposibles de sortear o eludir, terremotos catastróficos, inundaciones, huracanes y sequías que arruinan las cosechas y traen pobreza al pueblo.
Pese a estos eventos inevitables el país se ha vuelto a levantar y con grandes perdidas en vidas, construyo nuevamente los cimientos y entendió que la naturaleza es parte de la vida y continuo creciendo, fortalecido de la experiencia y temeroso de Dios.
Mas a sido golpeado por la ambición de sus propios lideres que han llevado a un grado inigualable de deterioro la expectativa de vida de una población que espera siempre esperanzada que las fuerzas que usan el poder reviertan en beneficio de las masas empobrecidas el caudal de los recursos y la fidelidad de la obra que es necesario construir.
México es un país rico en recursos humanos y naturales, una de las economías más poderosas de la tierra, sin embargo peso a peso, gente a gente es uno de los países más pobres del mundo.
Crece a retazos y recibe un peso, cuando sus políticos despilfarran dos y se quedan con tres, aumentando cada día los males que sufre la población, que no tiene necesidad de ello, ni logra encontrar el modo de sacudirse tan nefasta forma de hacer política. Males, corrupción a todos los niveles es un mal casi endémico que azota a nuestro sufrido país, donde la transparencia es una burla y los caciques una forma de vida.
Tenemos todo para ser igual de desarrollados que los EEUU, pero nuestra dependencia económica y la desigualdad con la cual se construye la sociedad, impiden desarrollar un campo que ha ido muriendo poco a poco, sirviendo de mano de obra barata al vecino del norte y trayendo la engañosa forma de la remesa que no aporta desarrollo alguno mas que dinero para un gasto que esta sujeto a las altas y bajas de un empleo a salto de mata huyendo de una migración cada vez mas agresiva y discriminatoria.
A todas estas sumemos las calamidades de epidemias, que traen muerte y dolor a la población, pero acrecienta en sus medidas los padecimientos económicos que sufrimos, una crisis económica que disminuye los ingresos en los hogares, que ven detenidos sus proyectos de superación, reflejándose en abandono de escuelas, apatía hacia la vida política e institucional y el agobio por el abultado pago de los compromisos contraídos, con el pago de hipotecas, y otros haberes del hogar, siendo aterrorizados y presionados con una jauría de abogados para devolver de donde no hay pagos a compañías que se vuelven agresivas y despiadadas ante la vista de un gobierno incapaz de poner un alto a tanta voracidad.
Millones de pesos se destinan a campañas políticas y la política esta demostrando ser cada vez más ajena al sentir popular, cosa que se traduce en campañas repletas de apatía y baja participación ciudadana, resultado de procesos donde se burla la voluntad del electorado, y donde la riqueza pasa de mano en mano entre los que se tratan de arrebatar el poder, denigrándose, sin pensar con espíritu patriótico en levantar de sus quebrantos la necesaria simiente de la nación.
Hoy mas que nunca meditemos en esto y seamos solidarios con un México que lucha cada instante por salir adelante, y aún así amanece dando gracias a Dios y confiado en que el nuevo sol le dará la oportunidad de traer un pedazo de sustento a miles de hogares pobres que no cuentan con el apoyo de nadie.