Poesía, cantos, no son mas que historias que se hacen en un minuto y algunos mínimos retoques.
Una frase coherente, unas pocas palabras, donde encerramos horas y horas de quien sabe cuantos sufrimientos, vivencias y experiencias que al cabo el vivir de alguna forma nos lego.
Nuestros errores y los aciertos, los amores que fueron en su momento motor de satisfacción.
Los imposibles y aquellos que no pudieron concretarse, por que la juventud no sabe a veces valorar quereres.
Las vivencias de otros, sus temores, los llantos de la joven que se aferra a querer a alguien que no la quiere.
La flor usa el perfume creyendo que engatusa abejas, mas estas libada la savia se vuelven prestas a la colmena.
Lagrimas, alegrías, ilusiones logradas que dejaron de serlo. Decepciones, sueños, entrega, caerse y volver a levantar.
Un llanto compartido, la muerte de alguien querido.
La rodilla sangrante de las muchas caídas y las manos llenas de callos por labrar la vida.
Tal vez no sea mucho, ni sea todo pero eso es también la poesía.
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