Quién le iba a decir a los
bocones de la Habana, que estarían, antes de morir, suplicando que el capital
regresará a la isla, de la que ellos mismos en un prepotente y abundante manejo
de la ignorancia lo corrieron hace más de 55 años.
Las vueltas que da la vida, desde
hace un buen tiempo han ido enterrando la filosofía marxista y la han
sustituido por un pragmatismo feudal.
Han vendido más al país que el dictador
Batista. Los negocios que este hizo con la mafia norteamericana, para poner en
La Habana, Casinos y Hoteles, no incluían que el Estado cubano les pagara a los
empleados de los mismos. Y se quedara con el 80 % de la ganancia.
No han podido hacer crecer el
bienestar de la población, las casas se caen a pedazos y los niveles de prostitución
y deterioro social y moral son alarmantes y amenazan con desintegrar el orden
familiar definitivamente.
Los obreros y campesinos no están
ni representados, ni defendidos por organismo alguno y rige más la anarquía que
la distribución socialista que durante años han pregonado en vano.
El sistema es un fracaso y se
mantiene por la represión y corrupción dos engendros del caos, que aman y
alimentan todos los tiranos.
Bajo palabra de decir verdad, la foto es de La Habana vieja, nos es Irag. Aunque lo parezca.
1 comentario:
jajajaja
y que usted esperaban
nadie cuida lo robado
Publicar un comentario