lunes, 7 de diciembre de 2015

De Maduro a podrido.

Aunque de fondo no ha cambiado nada en Venezuela, en las formas todo es distinto.  La apabullante respuesta nacional indica que el pueblo ya se cansó de pasar por malos momentos.

El resultado de la votación llevada a cabo por los venezolanos este domingo es, no solamente un medidor del desgaste nacional de un pobre ejercicio de poder, es la respuesta contundente de un pueblo ante un gobierno empobrecedor y mangoneado a ojos vistas desde la cúpula de la tiranía cubana.

Los acróbatas políticos de la mancomunidad tiránica, deben estar preparando de manera acelerada respuestas ante el desmoralizante resultado.

Es evidente que hasta los mismos chavistas votaron en contra de Maduro.

La población se volcó en una jornada histórica. Mucha juventud que no tiene pinta de burgueses, ha dicho basta a una sucesión presidencial que ha tenido sumido al país en la peor crisis de la Venezuela moderna.

El prospecto de socialismo del siglo XXI, se presume muerto o en grave estado de descomposición.

Temo que algunas mentes macabras pretendan revivirlo a sangre y fuego. Sin embargo todo parece indicar que es tan grave el desgaste político que ni los cerebros del pentágono habanero, hilvanan una estrategia apropiada.