viernes, 17 de julio de 2015

El eterno mal de la corrupción

Se ha escapado por segunda vez el famoso delincuente, Joaquín Guzmán Loera conocido como el "Chapo" Guzmán.

Poniendo en ridículo a todo el aparato de Seguridad implementado para impedir precisamente lo que acaba de suceder.

Un túnel hecho en la misma cara de sus captores y una estrategia muy bien planeada han convertido en hazme reír al segundo gobierno que presume de haberlo llevado a prisión.

Nuestras cárceles son efectivas, tal vez como otras del mundo y no lo ponemos en duda. La gran diferencia es la calidad moral de quienes están para cuidar que personas de alta peligrosidad como la que se menciona no puedan evadirse. 

No es tarea fácil cuidar que alguien, sea quien sea se evada de una prisión. Más si es un individuo que conoce el bajo mundo de las debilidades humanas y el deterioro moral de sus custodios. 

Las versiones se suceden, cada una más espectacular que la anterior y todas en verdad creíbles. 

Lo que no cabe duda es que fue ayudado a escapar por muchas personas. De su equipó personal y otros que el dinero ha comprado para permitir tener acceso a planos y ubicación del interno sin errar un milímetro a la hora de realizar la excavación que permitió la salida del penal, supuestamente. 

Y digo supuestamente, pues bien pudo salir por la puerta principal y ser alterados los sistemas de vigilancia y no aparecer en cámaras, ni registro alguno. 

En vano luchan algunos, arriesgando sus vidas para que otros los dejen libre, además por una buena cantidad de dinero.

En este juego de gatos y ratones, México sale muy mal parado al interior y al exterior, pues no es un secreto para nadie a lo ancho del mundo que somos un país corrupto y con dinero se puede salir de la cárcel sea usted el  archiconocido "Chapo" o Juan Pérez. Si usted paga, usted sale. 

Por ello escuchamos decir luego en los noticieros, que tal persona había entrado y salido del Reclusorio, tantas y más cuantas veces. 

Somos así víctimas pasivas de una caterva de corruptos que hacen fortuna explotando las perversas lagunas del poder. 

Y al hacer esto ponen en la calle a todo aquel que a sabiendas que con dinero se obtiene la libertad, para continuar su carrera delictiva, hasta que se tropieza con la bala de algún honesto policía que los detiene en flagrancia.

Lacras disfrazadas de policías, Ministerios Públicos, Directores de penales, incluidos Jueces, Magistrados y cuanto chango se atraviesa en el camino entre la calle y unas rejas, hacen su agosto.

Cuándo acabará todo esto, nadie sabe. También la Presidencia recibe casas, otorga permisos y corrompe y no parece haber remedio en tales cosas.

También los Jueces de todas las instancias se dejan corromper y emiten fallos que los desnudan y jamás, jamás, pasa absolutamente algo que indique que vamos camino a mejorar. 



sábado, 11 de julio de 2015

LOS MAESTROS EN LA ENCRUCIJADA DE SUS RESULTADOS


La educación de nuestros hijos no es parte  de la beneficencia del Estado, ni se resuelve con una torta y un refresco, si no entrándole con la camisa remangada, con valentía y patriotismo, educamos para lograr un México de primer mundo, no para darle vida de primer mundo a los dirigentes sindicales que se chupan el dinero y no les importa la calidad educativa, o muchos politiquillos de ocasión, ajenos al compromiso histórico que vivimos.

Estoy leyendo en un diario de circulación nacional sobre el nerviosismo que presentan los maestros al enfrentarse a la evaluación docente, que ha traído rechazo y mucho cuestionamiento.

Siendo maestro yo mismo, veo las cosas desde otro aspecto, entiendo el nerviosismo de mis colegas, aunque en verdad los temas tratados en la evaluación son o deben ser, del dominio de los mismos.

Advierto sin embargo que los verdaderos resultados están de forma pública, expuestos a los ojos de propios y ajenos en las cifras mundiales de los exámenes que se efectúan a nuestros educandos cada año. 

La respuesta a los cuestionarios de la Secretaría de Educación Pública, solo son un trámite más.

Ahora se presenta otra interpretación, muy propia, si los resultados de las evaluaciones son favorables a los maestros, y los resultados de los exámenes nacionales a los estudiantes arrojan tan bajo desempeño de los alumnos, estamos ante otra problemática, alguien no está haciendo su trabajo de manera profesional.

Alguien simula o no da su mejor entrega a la vocación de ser maestro. O de plano no sabe ser maestro.

Se conoce, debido a las estadísticas de las diversas pruebas: Enlace, Olimpiada, Pisa. Escuela por Escuela, salón por salón y por ende maestro por maestro.

De quién es entonces la responsabilidad de pedir cuentas, de ajustar procedimientos y exigir resultados.

Así como piden derechos laborales, deben ser profesionales para ofrecer clases de máxima calidad.

Comprendo y muy bien que entiendo las deficiencias de la S.E.P. para habilitar salones y proveer a las Escuelas de todo el material posible que facilite el trabajo a los docentes, pero vengo de donde se borran cuadernos para usar el próximo ciclo escolar y ni gises hay muchas veces. No escucho cuentos de carencias, porque las conozco casi todas.

¡El que quiere enseñar se crece ante las dificultades!

Es el empeño del maestro, su entrega, su vocación, el celo que tiene de sacar adelante a sus alumnos, por el mismo prestigio personal y el beneficio de sus educandos.

Los resultados que vemos a nivel mundial nos dicen que tenemos mares en vez de lagunas que atajar. Y comprendo que es una lucha de todos los involucrados, maestros y sociedad, Gobierno y Secretaría. 

Tal vez no se tenga el Secretario idóneo, que en vez de ser errático y timorato, elabore estrategias sencillas de supervisión y control de desarrollo de docentes, mediante visitas y apadrinamiento a escuelas donde están los maestros menos preparados, hasta el lamentable, pero necesario despido de quien no da el ancho para educar. Así mismo cesar al propio titular de ser preciso.